El jueves 11 de junio de 1914, El Mundo Deportivo publicaba en su página 4 (el ejemplar de aquel día constaba de 6 páginas y se vendía al precio de 10 céntimos de peseta, algo así como 0,05 céntimos de euro) la reseña del primer partido de fútbol femenino del que se tiene constancia en nuestro país. El encuentro tuvo como escenario el campo del por aquel entonces conocido como ‘Español‘, el campo de la calle Industria, concretamente ubicado entre las calles de Muntaner y Casanova.
El choque se disputó dos días antes, en concreto el martes 9 de junio, y su repercusión fue mínima. Apenas treinta líneas con el escueto titular: ‘Las niñas futbolísticas‘. Un siglo de vida en el que el deporte femenino, incluido el español, ha experimentado una progresión extraordinaria, si bien es cierto que sin obtener a cambio el merecido reconocimiento mediático.
Pese a ello, cabe resaltar el delicado momento histórico de dicho partido en una Europa convulsa que no favoreció la continuidad deportiva iniciada y supuso un grave retraso a las aspiraciones futbolísticas de la mujer, ya que unos pocos día después (28 de junio de 1914) en Sarajevo se producía el atentado que costó la vida de Francisco Fernando de Austria y que desencadenó, justo un mes después (28 de julio de 1914), en el comienzo de la Gran Guerra (1914-1918) que enfrentó al mundo y a Europa en particular. Cuatro años de contienda y unas terribles secuelas humanas de 8 millones de muertos y 6 millones de discapacitados no dieron mucha opción a juegos de aventura.
De ese partido del que se cumplen hoy 100 años. A las pioneras, que lucharon contra todo tipo de prejuicios y una opinión pública nada favorable a su irrupción en escena, les quedaba un larguísimo camino por delante antes de poder normalizar su situación. En los años 70, casi en la ‘clandestinidad’, aparecieron los primeros clubs, como el Mercacredit y el Sizam, sin el amparo federativo. La Federación Española no reconoció el fútbol femenino hasta la presidencia de Pablo Porta, en noviembre de 1980.
El debut de la selección española femenino todavía debería aguardar otros tres años. Tuvo lugar el 5 de febrero de 1983, en un amistoso ante Portugal disputado en La Guarda: 0-1 para las lusas. Años antes, el 21 de febrero de 1971, en La Condomina, España y Portugal jugaron un amistoso (3-3) ante 3.000 espectadores que desafiaron a la propaganda del régimen, orquestada por la Sección Femenina de la Falange Española, en contra del partido. Conchi Sánchez (apodada la ‘Amancio’) era la capitana de un equipo que no lució escudo. El árbitro Sánchez Ramos dirigió el partido en chándal en lugar de la vestimenta oficial. Eran otros tiempos…
La crónica
Mundo Deportivo (11 de junio de 1914 )
«Anteayer, en el campo del ‘Español’, jugóse el primer partido de futbol entre representantes del sexo débil, que en dicho día se parangonaron con el fuerte. Este partido, cuyos beneficios se destinaban a favor de la Federación Femenina contra la Tuberculosis, era, por su naturaleza, esperado con cierta espectación, siendo presenciado por un público regular y por el capitán general de la región, que acudió con su bella hija Carmen. Las jugadoras estuvieron a la altura que les correspondía, notándose en el comienzo del encuentro bastante azaramiento, que fué desapareciendo hacia el final, en el que el bando ‘Giralda’, que lucía jersey rojo, consiguió apuntarse dos goals por uno que en la primera mitad entró el ‘Montserrat’, que lo ostentaba blanco. Esta primera actuación de la mujer en el viril fútbol, no nos satisfizo, no sólo por su poco aspecto sportivo, sino que también porque a las descendientes de la madre Eva les obliga a adoptar tan poco adecuadas como inestéticas posiciones, que eliminan la gracia femenil».
Jaume Miserachs
Fuente: mundodepotivo.com