No hay figura en el hockey línea femenino español que pueda hablar desde tantos puntos de vista como Alba Calero. Calero lleva muchos años vinculada al hockey línea, y ha pasado por prácticamente todas sus fases. Desde jugadora de base, a jugadora de División de Honor, posteriormente dio el salto a la formación deportiva y a la Selección Española de hockey línea. Con el tiempo, vivió el cambio a la Liga Élite Femenina y se interesó por el arbitraje hasta convertirse en árbitro internacional, lo que le ha obligado a disputar la Liga Oro para poder compaginar sus dos pasiones.
Pregunta: Es complicado empezar una entrevista con tantos puntos que tratar ¿Cómo llevas esto de ser tan polifacética?
R: Ahora estoy en un momento de transición, he estado muchos años de jugadora y he vivido de todo. Ahora he notado que llegaba el momento de un cambio. A nivel nacional, el arbitraje ha mejorado mucho en los últimos años, y hace tiempo que empecé a interesarme, le veía como un reto. Cuesta desengancharse de ser jugadora, pero ahora ya no estoy con el compromiso de antes, he tenido que dejar la Liga Élite para poder pitar ahí, pero aún estoy como jugadora, e intento transmitir mi experiencia. He cambiado de equipo, con jugadoras jóvenes que nunca han jugado en la Liga Élite, ni han ido a un mundial, y estoy intentando transmitir mi experiencia.
P: ¿Como jugadora, qué momento destacarías de tu carrera?
R: Destacaría mi primer mundial, el de Bilbao, porqué yo era muy joven, y fue una gran experiencia. Jugué con jugadoras que eran un referente para mí, y eso fue muy importante. Pude trabajar con esta gente que lo había hecho todo y quería demostrar que a pesar de la diferencia de edad yo podía aportar. Ganamos a equipos que la gente no se esperaba, como Francia, y a nivel de emociones fue muy fuerte.
P: Has estado en las dos medallas de bronce conquistadas con la selección ¿Qué destacarías de cada una de ellas?
R: El primer bronce fue muy importante, porqué habíamos estado muchos años trabajando y nunca podíamos luchar por la medalla. Lo hicimos en Italia, y perdimos, pero al año siguiente, en Colombia, lo conseguimos. Hubo un cambio, por primera vez nos lo creímos, que teníamos buen nivel, todos los años de frustración y trabajo para ver que finalmente era posible. De la otra medalla, me quedaría con el triunfo contra Francia, porqué siempre habíamos luchamos contra ellas para ver quien gana. En los amistosos ganaba uno y lego en el mundial ganaba el otro. En el mundial de Colombia conseguimos el bronce, pero no jugamos contra Francia, y nos quedó eso en el tintero. En Toulouse conseguimos el bronce ganándolas en casa, y eso fue muy importante.
P: ¿Es el mejor momento del hockey línea femenino?
R: Sí, no tengo ninguna duda. En los últimos años se ha visto como ha crecido muchísimo el nivel. El nivel de las porteras ha incrementado bastante. Antes no lo teníamos tan trabajado, y ahora se ha trabajado tanto que las jugadoras de pista se han tenido que poner al nivel.
También los cambios de la liga nacional y el trabajo con las selecciones. Las jugadoras han visto que quieren participar a este nivel. Parecen pocas cosas, pero cuando las juntas han dado un resultado muy alto. El oro de las juniors hace que las seniors tengan presión porque ven que si no espabilan les sacarán el sitio.
P: ¿Qué le falta a la selección para conseguir estar en una final?
R: Una cosa que nos falta a todos es el tema de la eficacia de cara a portería. Una cosa muy positiva que tenemos en España es el equipo, el grupo. Hay mucho compañerismo, y esto nos diferencia de muchos países, nosotros trabajamos en equipo, mientras los otros destacan a nivel individual. Debemos ser conscientes que hemos de trabajar más a nivel individual. Realmente, es increíble lo que se ha conseguido como equipo. Si se nos mira a nivel individual, tal vez hay países con más talento y más efectivos, pero como somos una, trabajamos para tapar este agujero. Lo que se debe trabajar es a nivel individual, un tema de eficacia. Que la gente sea consciente de esto, que somos un equipos pero que nos falta un plus.
P: ¿Cómo ves la actual la Liga Élite Femenina?
R: Este año está muy interesante. Hay equipos reforzados, y la liga está muy loca. El tema de la portería que he señalado es importante. Hay equipos con muy buenas porteras que han hecho que las jugadoras se esfuercen y mejoren, y ahora está todo muy igualado, con lo que puede pasar cualquier cosa. El Rubí no ha perdido ningún partido, pero lo podría haber hecho. Contra las Tucans ganaron 1-0 marcando a 50 segundos del final. No sé quien ganará, y la liga no está entre dos equipos, sino entre cuatro o cinco, no me atrevería a apostar por nadie.
P: Hablemos ahora de tu faceta como árbitro. ¿Cuándo empezó a nacer las ganas de arbitrar?
R: Fui a vivir a Valladolid en el 2008, y empecé a hacer muchas cosas, jugaba, entrenaba, y mientras hacía un curso de entrenadora, una amiga me dijo que porqué no hacía de árbitro, y vi que me gustaba. Me gusta hacer las cosas bien, y creo que aquí se pueden hacer, quería formar parte de esto. La verdad es que lo relaciono todo al hecho de coincidir con Naco Rodríguez y Xavi Chao, ellos fueron un cambio muy importante para el deporte. Su manera de trabajar introdujo las tecnificaciones, las nuevas ligas, etc. Mucho de los árbitros estaban muy cómodos, hacían su trabaja y ya está. Como jugadora yo ya lo noté, el simple hecho de que necesitaran las tablets, te hacía ver que tenían que estar preparados, que no lo podía hacer cualquiera.
P: ¿Cómo viviste tu experiencia como árbitro internacional en el mundial?
R: Fue muy positiva, me hizo coger mucha confianza. Llevo tantos años de jugadora viendo como arbitran en España que yo ya conocía en bagaje de mi compañero. En el mundial yo no sabia nada de mi compañero, y no tenía expectativas. He trabajado con gente de Francia o Canadá, y ha sido muy positivo ver como todo el mundo trabaja en equipo y se ayuda para que todo salga lo mejor posible. Da cierto respeto pitar a países en un mundial, pero te ayuda a nivel de confianza. Me quedé impresionada con mi actitud, como asumí la responsabilidad y demostré que no tenía dudas. Que te demuestren respeto y te feliciten países como Estados Unidos, Canadá o Australia fue muy importante.
P: Actualmente aún queda mucho para llegar a la paridad de sexos en el colectivo arbitral ¿Cómo se puede conseguir mejorar esta situación?
R: La verdad es que estoy contenta porqué sí he visto que hay jugadoras que se están interesando, que desaparece el famoso “qué dirán los demás”. Hay jugadoras que al verme se han dado cuenta que no pasa nada. Una chica de Barcelona, que ahora se ha ido a Madrid, me ha dicho que ha empezado a pitar, y también conozco otra chica que ha dado el paso. Costará que las chicas se interesen porque ahora lo que quieren es jugar, pero el primer paso ya está hecho. Tenemos el mismo derecho y tenemos una visión propia y un punto vista de organización y responsabilidad. Tengo la esperanza que cuando algunas dejen de ser jugadoras y quieran mantenerse vinculadas al deporte, arbitren.
P: ¿Podrías mandar un mensaje a las jóvenes jugadoras que ahora empiezan en el hockey línea?
R: Que disfruten del deporte y que sueñen con lo que quieren conseguir. Si proyectan esta imagen lo conseguirán. Ahora mismo tienen la suerte de estar en un país en el cual se trabaja mucho. Con el nivel que hay, podrán llegar donde se lo propongan trabajando y disfrutando del trabajo. Yo recuerdo que lo quería todo, y tuve la suerte que un entrenador me dijo que si lo quería lo podría conseguir. Tienen que ver a las otras compañeras como tales, que trabajen a nivel de tecnificación individual, pero el deporte no es individual sino colectivo, si trabajas como equipo evolucionas.