El Club Náutico Santixo está promoviendo la participación de la mujer en la vela y cambiar la imagen de este deporte como algo masculino
Cuando hablamos de la participación de la mujer en el deporte, nos vienen a la mente todo tipo de actividades y competiciones deportivas pero en muy pocas ocasiones nos imaginamos, por ejemplo, a una mujer en una regata de vela. Una actividad que, gracias a libros y películas, nos retrotrae a avezados lobos de mar. Precisamente para cambiar esta imagen de deporte masculino está trabajando activamente el Club Naútico Santixo de Zumaia. Muestra de ello es el protagonismo que este año han tenido las mujeres en la regata Olarru Cup que organiza este club y en la que han tomado parte barcos de Gipuzkoa y Bizkaia.
Begoña Pinedo, Miren Zubiondo, Ainhoa Acuña, M. Rosario Peñin y Edurne Egizabal son cinco mujeres que no han dudado en montar en un velero y surcar las aguas empujadas por la fuerza del viento. Todas ellas coinciden en afirmar que la vela es un deporte que engancha y muy apropiado para las mujeres: «Siempre hay un puesto en el que se requiere más maña que fuerza», comenta Miren, quien añade que «es fundamental dar a conocer este deporte, sobre todo entre las mujeres». Para Ainhoa, la Olarru Cup ha sido su primera vez y reconoce que este deporte la ha atrapado. «Es muy apropiado, rápido, ágil, dinámico, refuerza el trabajo en equipo, recomendable para las mujeres».
Recalcan también el buen ambiente que se vive en los barcos y señalan que han trabajado siempre en condiciones de igualdad, sin ningún tipo de trato discriminatorio: «la tripulación te trata como uno más» -dice Edurne- «y si necesito ayuda ¡pues la pido!, como lo hace cualquier hombre». Rosario reconoce que con ella se han portado de manera especial pero «es porque soy muy torpe, no por mi condición de mujer», bromea.
Gozar de la naturaleza, disfrutar y potenciar el trabajo en equipo son algunas de los valores que tienen para ellas la Olarru Cup y la vela en general. «No es un deporte difícil, es más, en días de poco viento, es hasta aburrido», afirma Miren, quien sostiene que «tendrían que practicarlo más mujeres». Begoña da la fórmula para quitar el miedo al que tiene repartos de subirse a un barco: «La mar tiene sus propias reglas y para que las mujeres se acercaran más a este deporte habría que hacerlo poco a poco, aprovechando por ejemplo para hacer prácticas con buena mar».
Fuente: http://www.diariovasco.com